La selenita simboliza la pureza espiritual. Infunde paz profunda y se recomienda para la meditación. Se considera una piedra para la expansión de la consciencia y para activar los centros de energía superiores, como el chakra de la corona. La selenita ayuda a calmar la mente y favorece la claridad y la lucidez.
El palo santo, por otro lado, es una madera sagrada utilizada ancestralmente en rituales de limpieza espiritual. Conocido por su fragancia dulce y terrosa, el palo santo se quema para purificar el espacio, atrayendo energías positivas y disipando las negativas.
3pz de palo santo y 1 punta de selenita