Los minerales y cuarzos combinan propiedades protectoras, curativas y energéticas. El ónix protege contra energías negativas y fomenta la fuerza interior. El cuarzo rosa promueve el amor y la sanación emocional. El jaspe rojo impulsa la vitalidad y el coraje. El lapislázuli potencia la sabiduría y la comunicación espiritual. La calcita eleva la claridad mental y la renovación energética, mientras que el ojo de tigre atrae prosperidad y brinda equilibrio y protección.